Estas pequeñas bichitos posaron para mí en otoño pasado, son encantadoras, a mi me han enamorado, parecen muñequitas. A pesar de que no es fácil fotografiarlas porque son bastante vergonzosas y cuesta ganarse su confianza, con la paciencia de los padres y un poco de juegos conseguimos estas bonitas imágenes de ellas.
La verdad que yo estoy encantada con los resultados, la luz, las modelos, el otoño, todo es magia. Gracias como siempre por la confianza, ha sido un honor para mí.